Como iglesia hemos confiado en Dios en todo momento.
Hacemos pactos voluntarios que ponen en práctica nuestra fe y a lo largo de nuestra historia hemos visto a Dios obrar de forma poderosa, sabiendo que Él honra el esfuerzo de sembrar una semilla en el ministerio una vez al año.
El Dios de paz está contigo para que no haya nada que te arrebate Su bendición y fuerza.
A través de la fe, activa la Palabra del Señor en tu vida y Sus promesas se cumplirán.