“Dame tu enfermedad, yo la llevo. Ya no es para ti, es para mí. Dame tu maldición, dame tu vicio, tu pobreza, tu escasez, tu pecado, es para mí, ya no es para ti;” Jesús la tomó y se la llevó.
La memoria se administra; tú decides qué recuerdos quieres guardar para que te impulsen a un futuro mejor.
Hay bendiciones de Dios para tu vida que llegarán a través de las manos de alguien más, y por eso, Dios te dice: "sé amigable con todos". Qué pasa si la bendición que Dios tiene para mi vida va a llegar a través de alguien, pero con quién no has sido amable?