Dios da semilla al que siembra.
Todo lo que pidamos al Padre, él nos lo dará.
Trae los diezmos al alfolí.
Lo mejor siempre está por venir.
Creer es el principio de toda bendición. Para ser grande y alcanzar tus sueños debes tener la confianza de la semilla más pequeña y humilde.
Nuestros ojos y entendimiento deben abrirse para creer Las Escrituras.