09 de enero de 2016
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Este nuevo año, tú forjarás la historia, como Moisés, José y Pablo, ¡el plan que Dios tiene para ti cambiará la historia! La mano de la historia está sobre ti hoy, Debes interactuar con el plan de Dios, de lo contrario solo vivirás la historia, pero estás llamado a forjarla.
Tú eres la herencia de Dios en la tierra. Debes comprenderlo para liberar tu potencial, basado en el plan de Dios para tu vida. Tengo doce nietos, la más pequeña es una niña de seis meses. Todos son parte de mi legado, son niños que no hacen mayor cosa por ser queridos, simplemente saben que los amamos y cuidamos de ellos, aunque no tienen conciencia de eso, damos la vida por ellos. Así es Dios, se ocupa de ti, eres Su legado y te cuida más de lo que crees e imaginas porque te programó para portar Su herencia. Como cristianos estamos llenos de información, inspiración y revelación de Dios, pero quedarás frustrado si no actúas conforme a todo eso que conoces y sabes. Sin tener aplicación en un plan, las promesas del Señor no se harán realidad en tu vida.
Por favor, que te quede claro, la esperanza no es una estrategia, la necesitamos para no tirar la toalla, pero de nada sirve sin un plan, ese que el Señor quiere darte. Nuestro Señor es Dios de planificación; la cruz fue planificada, y ya está planificando la cena del Cordero en el último tiempo. Considera que hay dos clases de planes, los que se originan en Dios y los que se originan en ti. Dios no está aquí para bendecir tu plan, no es su obligación hacerlo porque incluso podría ser contrario al Suyo, por lo tanto, Dios solo bendecirá el plan que nació en Él. Ahora prepárate para que te comparte Su plan, decláralo en voz alta: “Dios tiene un plan para mi vida y quiero obedecerlo”.
En tiempo del profeta Jeremías, los hijos de Israel se había rebelado en contra de los planes de Dios y fueron a cautividad, pero Dios ya tenía planes para Su liberación[1]. Sin importar qué tan grave sea tu estado, tu familia o tus finanzas, Dios envía un plan que está tomando forma en tu interior para liberarte de tu cautiverio. Él quiere descender sobre ti de una nueva forma. El plan de liberación de Dios para tu vida es individual, no es para nadie más. El éxito en cualquier área no es un accidente. Tu posición es única y particular, eres hijo de Dios e hijo del hombre, gracias a que el Hijo de Dios se hizo hijo de hombre para realizar el plan de compartirte Su herencia. No permitas que tu plan como hombre destruya Su plan divino en ti. Su plan incluye Su intervención divina, Su providencia. La mano de la providencia de Dios está sobre ti y tu familia, y realizarás grandes obras como David, quien mató a Goliat, pero esa proeza solo era una práctica para las conquistas que debía realizar y que realizó. Todo lo que has hecho hasta hoy solo ha sido una práctica, un ensayo para lo que viene para ti y tus generaciones, porque la bendición alcanzará a tus hijo, nietos y bisnietos.
Hay diferencia entre la grandeza de Sus planes[2] y lo pasajero de tus planes. Todo plan de Dios tiene fecha de cumpleaños, cuando nazca en ti, literalmente te levantará, levantará a tu familia y los llevará a bendición. Por el contrario, si vives conforme a un plan que nació de ti, no de Dios, te cansarás y te estresarás. Si vives de acuerdo al plan de Dios, sentirás Su soplo de poder, Su cuidado, ya no lucharás en tus fuerzas sino en las Suyas. Deja tus actitudes místicas, deja de buscar imposición de manos, un soplo de ministros, eso es esperanza, pero debes buscar Su plan. La esperanza te saca de la tumba, pero no te lleva a la plenitud de tu destino. Tu plan es personal y es producto de tu búsqueda personal de Dios. Nadie más puede dártelo. Podemos apoyarte con principios de crecimiento, pero solo tú tienes acceso al corazón del Padre para que te dé tu plan.
Hasta un milagro requiere un plan e instrucciones. Recuerda el milagro de la multiplicación de los panes, requirió de un plan, así como lo requiere tu milagro. Jesús dio instrucciones, les pidió que se sentaran en grupos[3] porque así no podían correr, sino que debían esperar confiados a que lo sobrenatural se manifestaría en lo natural. Allí están las dos dimensiones, lo sobrenatural del milagro y lo natural de la administración que se requirió para compartirlo con las personas. No basta con recibir la unción sobrenatural, hay que manifestarla en lo natural y eso requiere un plan estratégico.
Tu plan tiene vida, es vibrante y respira el aliento del Señor para sobrepasar los ataques del enemigo. Debes buscarlo como el pan diario, constantemente, para que se active. Dios quiere visitarte, soplar sobre tu vida de una nueva forma y para lograrlo te dice: “Solo necesito que cumplas lo que te he dicho en Mis Escrituras.” El Señor ya tiene una forma de sacarte de la cautividad y llevarte a bendición. Tomará tus finanzas del estancamiento a la abundancia, sacará a tu familia de la angustia. ¡Dios tiene grandes planes para ti! Pero los descubrirás cuando lo busques a Él con todo tu corazón. Busca Su rostro, dile que anhelas Su plan para tu destino, para tu matrimonio, para tus finanzas. Su plan es tan grande, tan generacional que talvez te cueste dimensionarlo. Su plan es más grande que tu intelecto, no lo comprenderás, pero si lo buscas con todo tu corazón, te aseguro que impactará tu espíritu y harás ajustes sin que nadie te lo diga. No permitas que tu vida y legado continúen en cautiverio, libera tu potencial descubriendo el plan de Dios y esforzándote por hacerlo realidad.
Que tu destino deje de ser invisible, el plan de Dios te hace visible para aquellos que Él desea a tu lado. El plan de Dios es como un sistema operativo que no puede funcionar en un dispositivo para el cual no ha sido diseñado. Debes convertirte en un dispositivo compatible con el sistema operativo del Señor. Deja de lado lo que tú quieres hacer con tus fuerzas, busca Su plan para hacerlo realidad, porque no tendrás la bendición plena de Dios hasta que no te conectes con Su voluntad. Cuando así sea, verás Su providencia para que esos planes se hagan realidad. Búscalo con todo tu corazón y tus fuerzas, y el Dios de la historia te utilizará sin barreras. Vive de acuerdo a Su plan, búscalo para experimentar esa aceleración divina. Tu dimensión como hijo de Dios debe activarse. Alinéate a Su plan y verás Su mano interviniendo en tu vida. ¡No te enfoques en tus planes, busca Sus planes y verás cómo todo cambia para bien!
[1] Jeremías 29:10-11 profetiza: Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar. Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Y seré hallado por vosotros, dice Jehová, y haré volver vuestra cautividad, y os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os arrojé, dice Jehová; y os haré volver al lugar de donde os hice llevar.
[2] 1 Juan 5:4 enseña: Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe.
[3] Marcos 6:39-40 relata: Y les mandó que hiciesen recostar a todos por grupos sobre la hierba verde. Y se recostaron por grupos, de ciento en ciento, y de cincuenta en cincuenta.
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