13 de noviembre de 2006
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Tu corazón debe estar listo para amar, fue el slogan del seminario Noviazgos 2006, el cual tuvo lugar en Casa de Dios del 10 al 14 de julio. Los jóvenes gozaron de una semana de ministración especialmente para ellos. El 58 por ciento de la congregación está integrada por jóvenes, quienes como tales, tienen dudas acerca del noviazgo; es por esto que se llevó a cabo el evento, con el objetivo de darles una idea más clara sobre este tema y así poder tomar decisiones tan importantes como escoger una pareja para formar una familia.
El evento estuvo dividido en temas específicos para cada grupo de jóvenes. El 10 y 12 de julio fue especial para las parejas; el 13, para los jóvenes y el 14 para las jovencitas, así se logró una mayor efectividad para trasladar el mensaje y responder preguntas más específicas.
Las conferencias estuvieron a cargo de los pastores Hugo y Herzy López, de matrimonios jóvenes; pastores José Antonio y Alejandra Putzu, de jóvenes y pre-juveniles; pastores Fernando y Patty Betancourt, de universitarios y jóvenes adultos. Los foros de discusión fueron dirigidos por la pastora Sonia; los pastores Carlos y Beatriz Rendón, red de matrimonios jóvenes; pastores Carlos y Lucky Montúfar, de la red familiar, y los pastores Juan Ramón y María Victoria Morales, de la red de empresarios.
Se escucharon consejos sobre la edad correcta para tener novio o novia, cuánto tiempo es saludable que dure una relación de noviazgo, qué es lo que Dios espera de tu noviazgo, integridad sexual, cómo caminar en una misma visión, entre muchos más que edificaron la vida de cada uno de los asistentes que fueron alrededor de 3,000, todos interesados en aclarar sus dudas y obtener un amplio criterio acerca de este tema tan común, del cual Dios está interesado que aprendas y pongas en práctica.
Temas relacionados:
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En la discrepancia entre lo real y lo ideal se encuentra la frustración, pero esa imposibilidad de tener o lograr aquello que se desea es la antesala para ver un milagro generado por la fe en una promesa de Dios.
Un padre de familia puede sufrir el síndrome de responsabilidad adquirida capaz de obstruir el beneficio de recibir la visitación de Dios, debido al enfoque constante de dar a los suyos; por eso Jesús enseña que siendo proveedores, como hijos, podemos recibir buenas cosas de nuestro Padre celestial.
Un canal de servicio empresarial provee una experiencia gratificante que brinda bienestar a quien lo recibe, de igual manera, entre el milagro que Dios hace y quien se beneficia está otra persona: un servidor lleno de compasión.
