La Biblia enseña que junto a alimentar al hambriento también debemos ayudar al enfermo, eso es lo que hace el equipo de profesionales que periódicamente viaja a distintos puntos del país para llevar esperanza a las familias.
Jehová te oiga en el día de conflicto; el nombre del Dios de Jacob te defienda. Te envíe ayuda desde el santuario, y desde Sion te sostenga. Haga memoria de todas tus ofrendas. Y acepte tu holocausto. Te dé conforme al deseo de tu corazón, y cumpla todo tu consejo.
Salmo 20:1-4