09 de octubre de 2019
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El pasado viernes 27 de septiembre el pastor Cash Luna fue invitado por autoridades estadounidenses a la Casa Blanca —residencia oficial y principal centro de trabajo del presidente de Estados Unidos— para celebrar el mes de la herencia hispana que hace honor a las personas de origen hispano que viven en dicho país.
Del 15 de septiembre al 15 de octubre se celebra la herencia, cultura, espíritu y contribuciones de los hispanos en Estados Unidos, por lo que la Casa Blanca realizó una actividad en la que participó la cantante estadounidense de música cristiana Christine D’Clario, cantando el himno nacional de Estados Unidos y su tema musical Como dijiste. Luego, el presidente de dicha nación, Donald Trump en compañía del vicepresidente Mike Pence, compartió un discurso en el que, entre varios temas, felicitó a esta comunidad por su constante lucha y agradeció el apoyo brindado a su gobierno.
Asimismo, el presidente Trump le cedió la palabra a Martha Ávila, una inmigrante cubana que preside la organización Heartbeat of Miami, que brinda ayuda a mujeres y parejas con embarazos no planeados o no deseados a través del evangelio, quien con su discurso reforzó el valor de la vida y la familia. “Fue un gran honor y de mucha bendición participar en la celebración de la herencia hispana en la Casa Blanca ya que es un evento que destaca la vida de los latinos en Estados Unidos”, indicó el pastor Cash Luna, mientras aseguró que Dios abre puertas inimaginables a quien le cree.
La fecha en la que da inicio la conmemoración de este evento hace referencia a un día significativo para la historia que marca el aniversario de la independencia de cinco países latinoamericanos: Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua. Además, otros países como México y Chile celebran su independencia el 16 y 18 de septiembre, respectivamente.
De una semana a un mes
La celebración del mes de la herencia hispana tomó escala nacional en 1968 durante la administración del presidente Lyndon B. Johnson, con la emisión de la Ley Pública 90-498, que declaró la semana del 15 y 16 de septiembre como la semana de la herencia hispana. Fue hasta en 1988, durante el mandato del presidente Ronald Reagan, cuando pasó de ser una semana a un mes de celebraciones para destacar la historia, idioma, pasado y futuro de los latinos en Estados Unidos.
Desde entonces el mes de la herencia hispana sirve no solo para realizar fiestas y distintos eventos culturales sino también para centrar la atención sobre los problemas que arrastra la comunidad, como pobreza, cobertura médica y migración, entre otros.
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