En esta entrega, el aprendizaje es un objetivo y la gratitud una solución; mientras vivimos cerca de Dios, el universo se transforma desde el corazón bajo Su perfecta voluntad.
Esta enseñanza aporta los ingredientes para ser un hijo de Dios que persigue apropiarse del carácter de Cristo en todas las áreas de la competitividad diaria, y lo hace mediante la introspección que beneficia el progreso y la mejoría personal.
Prohibido iniciar algo para después abandonarlo debido a los obstáculos o debilidad de carácter porque eso atenta contra la fe. Hoy aprendemos que una fe práctica conduce a resistir para triunfar con los mejores resultados.