20 de julio de 2022
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A través de la ADL, la iglesia busca ganar más almas para Cristo.
El pasado domingo 17 de julio en el auditorio de Casa de Dios Fraijanes inició la nueva temporada de la Academia de líderes (ADL) de forma presencial, la cual está dirigida a adultos, jóvenes y prejuveniles.
Desde sus inicios, el curso que tiene una duración aproximada de cinco meses se ha realizado con el objetivo de que cada vez más personas se capaciten para luego enseñar a otros. El pensum, que consta de 55 enseñanzas, continuará siendo el mismo, el cual tiene como propósito emplear los pasos que el Modelo de Jesús establece para llevar más almas a Cristo: ganar, consolidar, capacitar y enviar.
“En Casa de Dios sabemos que el aprendizaje es clave y determinante porque construye, forma, instruye y dirige; pero también es importante ponerlo en práctica para bendecir a muchísimas personas. A pesar de la pandemia y las distintas crisis que hemos atravesado no solo como país, sino a nivel mundial, y las que vivimos a nivel personal, continuamos formando grandes líderes”, aseguró el pastor Hugo López.
Los prejuveniles están a cargo del pastor Steve Morales —miembro del equipo pastoral y encargado del Ministerio de niños de Casa de Dios—, mientras que los jóvenes adultos son dirigidos por el pastor Hugo López, quien aseguró que continuarán formando líderes sin importar las circunstancias, pues es una bendición tanto para los alumnos como para los involucrados en el programa.
En está ocasión, por primera vez los estudiantes, además de estudiar el pensum de la Academia de líderes, podrán especializarse en un área ministerial de su elección: predicación, cultura de adoración o consejería. La graduación de esta promoción se llevará a cabo en diciembre de 2022, durante el congreso para jóvenes Hechos 29.
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En esta entrega, el aprendizaje es un objetivo y la gratitud una solución; mientras vivimos cerca de Dios, el universo se transforma desde el corazón bajo Su perfecta voluntad.
Esta enseñanza aporta los ingredientes para ser un hijo de Dios que persigue apropiarse del carácter de Cristo en todas las áreas de la competitividad diaria, y lo hace mediante la introspección que beneficia el progreso y la mejoría personal.
Prohibido iniciar algo para después abandonarlo debido a los obstáculos o debilidad de carácter porque eso atenta contra la fe. Hoy aprendemos que una fe práctica conduce a resistir para triunfar con los mejores resultados.
