04 de mayo de 2019
Tiempo de lectura: < 1 minuto
Lucky Figueroa es parte del liderazgo de Casa de Dios y encargada de un grupo de la iglesia. Ella conoció a Normita, por varios días estuvo invitándola a su grupo para que conociera a Jesús, pero ella no se sentía digna, porque trabajaba en un bar.
Después de varios días de insistirle, ella aceptó ir a un encuentro, donde Jesús la restauró y renovó su vida. Desde ese momento Normita decidió compartir de el amor de Jesús a sus compañeras de trabajo. Normita ahora trabaja con Lucky, decidió dejar a un lado su trabajo antiguo y junto con su esposo sirven a Dios.
Temas relacionados:
Liderazgo | Milagros | Testimonios
El dilema entre pedir para satisfacer un placer personal o pedir para satisfacer una necesidad de beneficio colectivo puede ser el camino a la sabiduría, la excelencia y la riqueza.
Ante una calamidad, la reacción puede ser enojo, frustración y la pregunta: ¿Por qué Dios permitió que pasara esto? Aprendamos qué se puede hacer el día del infortunio.
Nacimos para triunfar, ser victoriosos y ganadores, pero el sabor a pérdida es parte del proceso hacia una conquista superior llena de oportunidades.