No hay nada imposible para Dios, creamos juntos por tu milagro

21 de noviembre de 2025

Tiempo de lectura: 2 minutos

Este próximo domingo 23 de noviembre, durante los dos servicios dominicales (a las 7:00 y 11:00 a. m.) se llevará a cabo el Domingo de Milagros con el Pastor Cash Luna, un espacio para creer juntos y recibir un milagro de parte de Dios.

La invitación está abierta para toda persona que está atravesando una enfermedad o tiene algún familiar enfermo, para unirnos como iglesia y orar juntos.

“El temor es un bloqueador de milagros; no temas, cree solamente” — Pastor Cash Luna.

A lo largo de los años, miles de personas han testificado cómo el Señor ha obrado con diversos milagros que muestran que Jesús sigue sanando, restaurando y respondiendo a la fe de quienes confían en Él. Así como en los evangelios, los testimonios llegan de diferentes formas y por distintos caminos: algunos reciben su milagro al instante, otros durante la adoración y oración.[i] Sin embargo, el mayor milagro que una persona puede recibir sigue siendo la salvación, recordándonos el sacrificio que Jesús hizo en la cruz y afirmando que Dios continúa haciendo milagros en el siglo XXI.

Datos del evento:

• Domingo 23 de noviembre de 2025
• Casa de Dios (Km. 21.5 Carretera a El Salvador, Fraijanes, Guatemala, C.A.)
• 7:00 y 11:00 a. m.

Entrada gratuita.

¡Te esperamos para creer juntos y ser testigos de lo que el Señor puede hacer!

[i] Lucas 5:17-26 (RVR1960): Aconteció un día, que él estaba enseñando, y estaban sentados los fariseos y doctores de la ley, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, de Judea y Jerusalén; y el poder del Señor estaba con él para sanar. Y sucedió que unos hombres que traían en un lecho a un hombre que estaba paralítico, procuraban llevarle adentro y ponerle delante de él. Pero no hallando cómo hacerlo a causa de la multitud, subieron encima de la casa, y por el tejado le bajaron con el lecho, poniéndole en medio, delante de Jesús. Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados. Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a cavilar, diciendo: ¿Quién es este que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino solo Dios? Jesús entonces, conociendo los pensamientos de ellos, respondiendo les dijo: ¿Qué caviláis en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir: Tus pecados te son perdonados, o decir: Levántate y anda? Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa. Al instante, levantándose en presencia de ellos, y tomando el lecho en que estaba acostado, se fue a su casa, glorificando a Dios. Y todos, sobrecogidos de asombro, glorificaban a Dios; y llenos de temor, decían: Hoy hemos visto maravillas.